El poder calorífico contenido en los residuos agrícolas se pone de manifiesto con este invento de origen andaluz: El Sistema Tomás. Esta salamandra de patente española calienta este comedor de 100 metros cuadrados situado en la sierra de Jaén, con temperaturas bajo cero y nevadas este año, utilizando como combustible orujo de aceituna, el residuo de la molienda del aceite.
Según nos cuentan los dueños de este restaurante de Noalejo, el Rincón de Pepe, antes de colocar este invento completamente autóctono gastaban 25 euros al día en gasoil o electricidad, ahora, a razón de 30 kilogramos de huesos triturados al día y 8 centimos de euro el kilo su consumo ronda los 2,4 euros/día, apenas el 10%. Y es que la eficiencia energética no se trata solo de conciencia ecológica sino de sentido común.
Por cierto, biomasa aparte, el conejo con ajos que preparan es increíble.